jueves, 31 de marzo de 2016

El sentimiento de culpabilidad


     ¿Qué es?

     Es una reacción normal producida ante el incumplimiento de alguna de las expectativas personales que nos han incorporado a través de la educación familiar o durante el proceso de socialización (escuela, amigos…). Desde el punto de vista psicológico, la culpa es un proceso positivo que nos ayuda a vivir en sociedad.
 
     Efectos de la culpabilidad patológica:

-                  Reduce la autoestima.
-                  Perjudica la cualidad de vida.
-                  Disminuye las relaciones de pareja.
-                 Puede afectar a la salud.

      Cuando nos sentimos culpables, ¿de qué tenemos miedo? 
  
-                     Del castigo.
-                     Del rechazo de los demás.
  
             La culpabilidad sana y la enfermiza.
 
-                       La culpabilidad sana aparece como una señal cuando violamos alguna norma moral, legal, ética o social, nos permite convivir con los demás y que reprimamos muchas conductas agresivas que complicarían la convivencia y podrían lesionar a los demás.

-                   La culpabilidad enfermiza se da cuando ésta surge sin que exista violación de ninguna norma, o esta norma no es universal y generalizada.

         Cuando una persona no tiene sentimiento de culpabilidad, nos encontramos ante una personalidad psicopática. Pero si tiene un sentimiento de culpabilidad desproporcionado, nos encontramos ante un problema psicológico. Ambos casos son patológicos, el primero afecta a los demás y el segundo a uno mismo.

      Síntomas de un sentimiento de culpabilidad excesivo.

-                    Constantes recuerdos del error que se cree haber cometido.
-                    Obsesión para reparar el supuesto mal.
-                     Pensamientos recurrentes de cómo podría haberse evitado el suceso.

¿Cómo afecta el sentimiento de culpabilidad a la salud mental?

-                          Provoca ansiedad y depresión.
-                          Fallos en la concentración y el procesamiento de información.
-                  El sentimiento de culpabilidad como a potente estresor, favorece la producción de glucocorticoides, como el cortisol, que en exceso puede provocar infecciones, úlceras y trastornos cardíacos.
-                 Podemos encontrar un alto sentimiento de culpabilidad dentro de trastornos como la anorexia y la bulimia. 
              
El sentimiento de culpabilidad visto desde diferentes puntos de vista.

Para el psicoanálisis, según Freud, el objetivo del hombre es satisfacer sus impulsos primarios reduciendo al mínimo en sentimiento de culpabilidad. Se trataría de un equilibrio entre los impulsos y las exigencias morales y sociales.
Para la psicología conductista “cuidado, que si te portas mal te voy a castiga”. El sentimiento de culpabilidad sería aquí una reacción de ansiedad que aparece ante el temor a un castigo, y en su lugar el menosprecio.
Para las religiones consiste en limpiar toda la culpa. Aparece la importancia del pecado como arma contra el que transgrede la norma.
Para los humanistas se trataría de escuchar a Pepito Grillo (la voz de la conciencia de Pinocho). No actuar contra nosotros mismos.
Para la sociedad se trataría del “qué dirán”. Si no estuviéramos rodeados de personas no existiría el sentimiento de culpabilidad, ya que éste está vinculado con la visión que los demás tienen de nosotros.

A fin de solventar el sentimiento de culpabilidad, las personas recorren hacia el autocastigo, escogiendo una vida con ansiedad y tristeza que se tiene que pasar estoicamente como cumplimiento de una pena por lo que se cree se ha hecho mal. Lo que comporta a una vida deteriorada que alimenta un aumento del sentimiento de culpabilidad,  hasta crear un círculo vicioso difícil de romper.

Como conseguir que el sentimiento de culpabilidad no se te coma.

-                               Tómate tu tiempo para analizar este sentimiento, de donde proviene, su objetividad, si responde a los hechos,…
-                                Observa tus reacciones y comprueba si se corresponden con las de la gente que te rodea.
-                               Reacciona con moderación. Pide perdón y si, es posible y necesario, repara el mal causado, pero no te autocastigues.
-                                 Recuerda que nadie es perfecto y aprende de tus errores.
-                               Olvida. Una vez seguidos los pasos anteriores y, reparado el mal, si es necesario, no vuelvas a pensar en ello y deja a un lado los remordimientos.


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